Siempre he pensado que hay dos tipos de personas, aquellas que se crecen ante los obstáculos que se les presentan en la vida y además son capaces de mostrarnos todos los días la mejor de sus sonrisas.
Aquellas otras que son incapaces de afrontar los problemas, prefieren lamentarse de su mala suerte y no hacen nada por cambiar su situación.
Por suerte o por desgracia en los últimos años me ha tocado descubrir a muchas de las primeras, personas que son todo un ejemplo vital y que te transmiten una fuerza difícil de explicar.
Personas que lo hacen todo mucho más fácil y que solo por el hecho de formar parte de sus vidas, de que nos hayan elegido, tenemos que sentirnos afortunados.
Hace tiempo, gracias a un buen amigo, llegó a mis oídos una de estas historias que sin duda alguna son todo un ejemplo de valentía y lucha, amor y entrega, pero sobre todo de generosidad.
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| Gracias!!! |
Algunos comenzamos a correr por nosotros mismos, por nuestra salud, pero este caso es muy especial, Nacho empieza a correr por la salud y la felicidad de Eugenia.
De un hija que ya sabían que tendría dificultades y que podrían haber cogido el camino más fácil, para la mayoría de nosotros, sin embargo decidieron dar a Eugenia esa oportunidad que nadie le quería dar.
Unos padres valientes, que ahora han decidido poner en marcha este proyecto y que sin duda alguna son todo un ejemplo a seguir.
Os dejo el enlace de su web y os invito a que os paséis, ya que merece la pena leer sus reflexiones y compartir sus experiencias.
Sin duda alguna todo un ejemplo a seguir.
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| Paula y Nacho |
Si Dios quiere este año Eugenia estará en Frankfurt y me ayudará a cruzar esa meta, siempre tan difícil, de un Ironman.
Jorge, quiero mi camiseta!!!
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